WEYES estudio builds a family home into the treetops of a mexican forest

En medio de un bosque en el Barrial, México, WEYES estudio ha creado una casa familiar que está diseñada para integrarse en su entorno natural. Con el acertado título de Casa en el bosque, el diseño se centra en el consumo mínimo y en la formación de un lenguaje arquitectónico que abraza la pasión de los clientes por el aire libre.

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El concepto rector del proyecto se centra en traducir el amor del cliente por la naturaleza en una casa que no destruye, sino que complementa el entorno. A la hora de emprender el diseño, el principal reto que planteaba el emplazamiento era su terreno irregular e inclinado, que oscila entre un 28% y un 35% de pendiente. En respuesta a ello, WEYES estudio desarrolló el edificio como un programa de cuatro volúmenes, conectados por escaleras, pasillos y puentes exteriores que respetan la topografía y la vegetación originales del bosque.

Ubicada en un terreno de 690.38 m², la nueva intervención encierra un programa de 165 m². Dividida en cuatro volúmenes interconectados, la ubicación de estos nuevos pabellones se ha guiado por los árboles y las raíces, y cada uno de ellos se ha colocado cuidadosamente en un esfuerzo por salvaguardar los diecisiete árboles que habitaban el sitio originalmente.

El alojamiento se ha desglosado en función de las necesidades y el estilo de vida de la familia. En conjunto, comprenden un pabellón común de 45.1 m² con terraza y patio interior, un pabellón de descanso privado de 30 m², un pabellón para visitantes de 27.72 m² y un garaje y almacén de 61.9 m². Estas masas han sido creadas para integrarse respetuosamente en el bosque, cubiertas por las copas de los árboles y que parecen flotar del suelo.

La estructura utiliza un sistema tradicional de columnas y losas de concreto aligeradas, con muros dobles de ladrillo que en algunos puntos se adentran en el paisaje para guiar los recorridos y crear patios exteriores semiprivados. La intención de dejar una «huella mínima» en el emplazamiento fue el principio rector del proyecto. El equipo conservó todos los árboles originales, el proceso de construcción fue de bajo impacto y sin maquinaria pesada, utilizaron materiales y suministros locales y de bajo coste, llevaron a cabo sistemas pasivos para mejorar la ventilación y la iluminación de los espacios y regeneró el suelo de las zonas afectadas por el proceso de construcción.

Con la colaboración de Global Sustainable Solutions, dirigida por el arquitecto José Borrani, se llevaron a cabo estrategias para la regeneración del suelo, lo que desencadenaría el crecimiento del ecosistema. El equipo actuó en un proceso de aireación del suelo compactado mediante maniobras constructivas y restauró el sustrato dañado con una cubierta orgánica de hojas.

WEYES estudio también evitó los sistemas sofisticados de ahorro de energía y se centró más en la reducción del consumo. Por ello, el diseño aprovechó la sombra de los árboles y la ventilación cruzada para la mejora de la temperatura interior. Los muros dobles mantienen la temperatura en los espacios interiores durante el invierno. El estudio resolvió la iluminación con ventanas y claraboyas durante el día e iluminación de bajo consumo por la noche. Asimismo, para las zonas de servicio utilizaron equipos de bajo consumo.

En general, la casa facilita una «huella mínima». Por lo tanto, en cuanto a la energía, en lugar de producir, la familia puede consumir lo mínimo. Para el consumo de agua, utilizar la gravedad y reducir el uso. Para la lluvia, permitir la infiltración en el subsuelo y las corrientes naturales de agua evitando la erosión; flora y fauna, integrarnos en sus ciclos. ¿El sustrato? Regenerar lo que ha sido dañado por la huella humana. Para el factor económico, resolver a partir de los recursos locales más lógicos; la iluminación, aprovechar la luz del día y reducir el consumo de luz nocturna. Para el control de la temperatura, sistemas pasivos tradicionales. Para la tecnología, centrar las comunicaciones y simplificar las tareas cotidianas. Todos estos factores dan como resultado una arquitectura considerada y respetuosa que encarna una forma de vivir más sostenible.