ventana roja resalta de reforma a refugio de piedra por mariana de delás

REINTERPRETANDO COBERTURAS TRADICIONALES DE PIEDRA EN MALLORCA

En medio de los verdes campos agrícolas de Palma de Mallorca, España, Mariana de Delás ha dado nueva vida a una apartada casa de piedra, transformándola en una estructura sibarita alejada del bullicioso centro de la ciudad. Apodado «12 Voltios», el retiro renovado sirve como intervención piloto del estudio en un proyecto más amplio que busca renovar una serie de cobertizos y refugios tradicionales en hogares temporales. Perfiles metálicos de color rojo vivo y muebles hechos a medida adornan el cobertizo, mientras que una serie de dispositivos alimentados por baterías recargables completan el interior, facilitando la vida de los ocupantes.

todas las imágenes por Tomeu Canyellas

TALLA DE UNA VENTANA ROJA BRILLANTE EN LA PIEDRA VIEJA

A lo largo de la isla se pueden encontrar numerosos abrigos tradicionales de piedra que se construyeron inicialmente como refugio para cazadores y pastores, y también como depósitos de herramientas de trabajo. Las estructuras consisten en paredes simples hechas de piedra de origen local. Además, la cubierta ligera de cerámica y teja, así como el reducido espacio que ocupan (van de los 5 a los 20 m2) las hacen destacar. Aunque la mayoría de ellos están actualmente en desuso, su exterior aún se mantiene intacto.

Mariana de Delás quería restaurar y resaltar este escondite en particular, al mismo tiempo que optimizaba el interior mediante la introducción de abundante luz natural y generosas vistas. El elemento central del proyecto es la ventana de proa de color rojo brillante tallada en la piedra antigua, que garantiza la ventilación cruzada y, al mismo tiempo, sirve como elemento interior para sentarse. La nueva apertura enmarca el paisaje tanto desde el interior como desde el exterior, restableciendo la conexión entre el interior y el exterior que faltaba. esta ventana es ideada, pensada y ejecutada en conjunto con el estudio local 2monos. A través de esta colaboración, el equipo de Mariana de Delás pudo crear los perfiles de metal más delgados posibles, junto con un mecanismo de apertura fácil, elegante y funcional.

LOS MUEBLES A MEDIDA OPTIMIZAN EL ESPACIO LIMITADO

El estudio también ha instalado una selección de mobiliario a medida que tiene un doble uso, aprovechando así al máximo el espacio reducido. Todas las intervenciones y muebles han sido construidos por ellos mismos para que los arquitectos pudieran explorar y perfeccionar el uso de diferentes materiales y opciones. Los bancos, mesas y taburetes se fabrican ensamblando la pieza tradicional mares de 80 cm x 40 cm en diferentes posiciones, reutilizando el elemento de fachada característicamente tradicional en el interior.

Siguiendo esta filosofía experimental, las instalaciones dentro del retiro están concebidas para funcionar de forma independiente al espacio que sirven. Estos dispositivos MEP están pensados para trabajar para garantizar la seguridad contra incendios/riesgos (ya que el entorno es muy seco) y para promover un estilo de vida de bajo consumo de energía, alentando a las personas a explorar la portabilidad de la batería.

CARRETILLA SOLAR Y BATERIAS RECARGABLES

El proyecto incorpora una carretilla solar que ayuda a optimizar la carga según la posición del sol, mientras actúa como un ritual matutino para cargar las baterías y los bancos de energía internos. Todos los componentes eléctricos de la casa están hechos con baterías pequeñas para que sean portátiles y se puedan cargar desde los bancos de energía que se cargan en la carretilla solar. Las luces y los ventiladores están hechos con baterías de 9 V que se pueden cargar fácilmente con el sol. Un banco de energía más grande y algunas baterías de scooter eléctrico de 12 V están disponibles para cargar computadoras portátiles, la bomba de agua y otros componentes de carga más pesada.

La carretilla solar sirve como un prototipo de estación de carga móvil que personifica el futuro de la vida móvil. «Una vez que las baterías de alta capacidad se vuelven más livianas, la red eléctrica y las instalaciones pueden viajar con el usuario y no fijarse en la arquitectura, haciendo y creando una nueva revolución de la vida nómada, donde la energía es portátil y está disociada del espacio al que sirve,» explica Mariana de Delás.