'residencia EF' de se abre hacia un entorno natural en México

En Chihuahua, México, operaciones urbanas ha diseñado la ‘Residencia EF’ como una casa mirador que se abre hacia su exuberante entorno natural. La vivienda de 418 m² se asienta sobre una ladera con la intención de subir la pendiente para ganar vistas del paisaje, interviniendo lo menos posible con la topografía local.

todas las imágenes Raúl Villalobos

El máximo respeto por el entorno natural era una de las principales peticiones del cliente. Por lo tanto, Urban Operations siguió adelante con su diseño, con el objetivo de preservar la topografía, tanto como sea posible. Los numerosos robles esparcidos por la parcela, guiaron a los arquitectos en la determinación de la ubicación exacta de la casa. De esta manera, la nueva estructura preserva la vegetación preexistente, mientras se conecta estrechamente con su contexto.

El enfoque de diseño se origina en el concepto de crear una casa de campo contemporánea, cubriendo las necesidades básicas de los residentes y brindando privacidad al interior. Aunque el área ya es bastante tranquila, el diseño busca crear un lugar donde uno pueda encontrar serenidad y ser uno con la naturaleza.

La conceptualización del volumen parte de una caja horizontal transparente, que es interrumpida por sólidos verticales que cumplen diversas funciones. Al interior, estos volúmenes verticales albergan los espacios de servicio, como baños, cuartos de lavado, áreas de depósito y ampliaciones de cocina. En el exterior, protegen los grandes paneles de vidrio del sol y ayudan a enmarcar las vistas desde el interior.

La vivienda se extiende como una gran terraza que proyecta vistas al campo, en contraste con la privacidad que ofrece la fachada posterior. El programa está organizado en dos niveles separados. Detrás de la casa, en el segundo piso, hay una entrada informal que emerge a través de una terraza en el techo, que funciona como un garaje abierto y a su vez conecta el volumen del garaje cerrado con el de la casa.

En el mismo nivel, se desenvuelve el programa de vivienda básica. Se accede a él a través de un pequeño vestíbulo que comunica inmediatamente un salón con el ventanal más grande de la casa. En esta misma planta, el diseño ubica el dormitorio principal que disfruta de amplias vistas del entorno. En el lado opuesto del piso y conectados visualmente a través de un pasillo longitudinal, se encuentra la cocina y el comedor.

El interior de la casa se concibe como un espacio fluido y continuo, con una conexión visual a lo largo de toda la planta. El salón se comunica con un semisótano a través de una escalera. Este espacio alberga un dormitorio de invitados, junto con un espacio de reunión familiar que tiene una conexión directa con un área privada al aire libre protegida por el entorno inmediato.