Estudio Galera construye composición de concreto a las afueras de Buenos Aires

Estudio Galera emplaza su «Casa Divisadero» en la región costera de Cariló, a las afueras de Buenos Aires. La vivienda existe como un artefacto autónomo sin una identidad arquitectónica clara. Respetando estrictamente los límites del terreno, la vegetación y la topografía natural, la casa, orientada hacia el interior, genera su propio mundo. Realizados en concreto aparente como un prisma rectangular a lo largo de un nivel, los tres volúmenes sustraídos generan patios que sirven para ventilar el perímetro e introducir espacios de transición entre el interior y el exterior. El límite de la casa se transforma, ya que estos patios pueden cerrarse en el borde exterior con persianas enrollables, asegurando así la intimidad de los residentes.

Todas las imágenes © Diego Medina

Estudio Galera se enfrentó al reto de ubicar la compacta «Casa Divisadero» con una orientación que maximizara la luz solar y, al mismo tiempo, integrara un garaje orientado hacia la calle. Penetrando en el volumen, un vacío sustraído aísla al garaje e introduce un patio de entrada. Como el volumen de un solo nivel se asienta sobre una topografía con suave pendiente, la casa se extiende hacia el exterior sobre una losa elevada. Las sustracciones de esta losa sirven para iluminar los espacios que se encuentran más hacia el interior del perímetro.

La austeridad formal de la casa refleja el carácter del concreto aparente. Uno de los principales objetivos de diseño fue ofrecer una casa que requiriera poco mantenimiento, ya que los propietarios pretendían que sirviera como casa de vacaciones. La materialidad, así como el acero y las chapas galvanizadas integradas a las puertas exteriores, se seleccionaron tanto por su bajo mantenimiento como por sus cualidades expresivas. Por su altura, materialidad y forma, la casa no pretende destacar dentro del paisaje. En cambio, la arquitectura sencilla, rústica y robusta existe dentro de un entorno natural casi intacto.