el minimalismo cálido de forma arquitectura se combina con la esencia modernista catalana

forma arquitectura reforma una casa modernista catalana

El estudio español Forma Arquitectura reformó una vivienda catalogada en la montaña de Montjuic, Barcelona, conservando su esencia catalana. La residencia modernista se encontraba llena de icónicos detalles arquitectónicos que habían pasado a un segundo plano después de algunas intervenciones realizadas por los propietarios anteriores. El objetivo era rescatar los valores originales de la vivienda e integrarlos con una intervención contemporánea. El resultado fue una reforma que no solo respeta la historia y la arquitectura del edificio, sino que también se adapta a las necesidades y los gustos de los propietarios, creando un espacio único.

todas las imágenes cortesía del autor

combinando elementos históricos y contemporáneos

Antes de rediseñar el espacio modernista catalán, el equipo de diseño de Forma Arquitectura se encargó de entender la historia y la arquitectura del edificio. Esta parte del proceso les permitió discernir cuáles elementos debían ser preservados para conservar la esencia de la arquitectura modernista catalana, tales como la estructura original del piso, como los techos altos y los mosaicos hidráulicos. Adicionalmente, otros elementos como las puertas de madera se restauraron restauraron algunos elementos como las puertas de madera.

Forma Arquitectura se encargó de entender la historia y la arquitectura del edificio

Para la intervención contemporánea, se optó por utilizar microcemento como material neutro y artesanal que hace resaltar las piezas originales de hidráulico recuperado. También dialoga con la cerámica destapada del techo y el ladrillo de las paredes. El mobiliario a medida es de madera de roble integrándose con el resto de carpinterías y creando una ambiente acogedor. En cuanto a los muebles de cocina se optó por grandes armarios minimalistas de tonos blancos añadiendo elegancia y dotando a la vivienda de la funcionalidad necesaria para una vida moderna. La atmósfera atemporal permite percibir una dualidad espacios: contemporáneo y moderno a la vez, logrando rescatar los valores originales de la vivienda.

para los muebles de cocina se optó por grandes armarios minimalistas de tonos blancos añadiendo elegancia