marko brajovic construye casa agüé, una vivienda modular de eucalipto

casa agüé aterriza en la selva brasileña

Bautizada como Casa Agüé, esta vivienda de madera sobre pilotes del Atelier Marko Brajovic está enclavada entre la exuberante selva de Paraty, Brasil. El equipo no desconoce el paisaje selvático, ya que terminó la cercana Casa de los Monos hace sólo dos años. Mientras que Casa de los Monos se elevaba desde las copas de los árboles con un exagerado armazón vertical en forma de ‘A’, la Casa Agüé recién terminada enfatiza su organización horizontal, abriéndose ampliamente hacia el vasto paisaje a través de un alargado conjunto de ventanas de altura completa.

El equipo explica el espíritu de la casa: ‘Casa Agüé toma de referencia la ligereza, como una pluma que descansa sobre las piedras de la tierra y se funde con las copas de los árboles’.

imágenes © Gustavo Uemura

El diseño modular del atelier Marko Brajovic

Los arquitectos del Atelier Marko Brajovic construyen la Casa Agüé siguiendo una lógica modular. Como tal, el edificio se divide en una serie de cubiertas abiertas y ‘módulos programáticos’ cerrados. Estos componentes se ensamblan en una disposición lineal, alternando entre patios sombreados e interiores iluminados por el sol. Esta organización horizontal ofrece amplias vistas panorámicas de las frondosas copas de los árboles y de la bahía de Paraty.

materiales naturales y de origen local

La Casa Agüé del Atelier Marko Brajovic está construida casi en su totalidad con madera de eucalipto, un árbol que se introdujo a Brasil a principios del siglo XX y que ahora se cultiva comúnmente en los bosques orientales del país, especialmente en la región en la que se encuentra la Casa Agüé. Esta madera de eucalipto compone la estructura modular, junto con los pisos y los muros. La materialidad natural se realza con una paleta que incluye mamparas tejidas de bambú y acabados en muros con revoques de tierra del lugar.

El equipo continúa describiendo los materiales de origen local: ‘A excepción del cristal y las baldosas termoacústicas, los materiales de construcción y toda la mano de obra se encuentran en un radio de cincuenta kilómetros del edificio, lo que supone un mayor control sobre los orígenes y la huella de carbono de la construcción’.

la casa está elevada sobre pilotes por encima de las rocas existentes del lugar
el Atelier Marko Brajovic eleva la casa entre las copas de los árboleslos espacios se alternan entre patios sombreados e interiores iluminados por el sol