EeG arquitectos diseña hostal en granja abandonada en sobrado, españa

intervención a una granja

EeG arquitectos revitaliza una granja del siglo XVIII en camino de santiago, españa con la intervención de un hostal. el edificio original, construido en madera y piedra, se caracteriza por sus numerosas ampliaciones que se han ido añadiendo a lo largo del tiempo hasta que en la década de 1970 renunciaron a él por su estado de abandono. desde entonces, la estructura de madera se había deteriorado y una sección de los muros de piedra se había derrumbado. el equipo observa que este proceso de abandono, como en muchos lugares rurales después de un éxodo a las zonas urbanas, provoca una transformación en el paisaje, que por lo tanto está moldeado por cambios sociales y culturales.

imágenes © héctor santos díez | @hector_santosdiez

eeg arquitectos, conectados con la naturaleza

el equipo de diseño de EeG arquitectos vuelve a conectar a la granja de sobrado con el entorno mediante la introducción de una nueva entrada que marca una continuación del camino. el edificio funciona como una transición, pasando por un gran espacio en la planta baja hacia el claro en el bosque. se conserva todo lo posible de la edificación tradicional. las adiciones que se hacen por funcionalidad, como las habitaciones en la planta baja o el aumento de altura, se mantienen mínimas. los gestos reformadores son más fuertes en las zonas necesitadas de más altura y los espacios que se abren hacia el sureste, debido a los muros que ya no existen o que fueron irrecuperables.

el nuevo hostal de sobrado

con su intervención en sobrado, EeG arquitectos respeta el contexto natural y la estructura original al introducir elementos transparentes y materiales tradicionales. estos nuevos elementos se utilizan para generar sistemas climáticos pasivos, mientras que las ventanas estratégicas controlan la temperatura, y las vides y la vegetación se utilizan para el control solar. por su parte, un elemento de agua genera inercia térmica y favorece la ventilación cruzada. en la planta baja, el sendero se marca en el piso interior, cruzando una sala central llena de luz, y saliendo hacia el claro del bosque.